Aportes de los saborizantes en repostería
Debido a que la vista, el olfato y el gusto determinan la percepción de productos horneados, es recomendable en la respostería el uso de saborizantes que potencien el sabor y el aroma de cada preparación.
De acuerdo con una investigación realizada por el Food Information Council, el principal criterio
(86%) para la compra de alimentos es el sabor. Es por ello que los saborizantes de alta
calidad juegan un papel importante en la industria panificadora y en la respostería.
Pueden ser elaborados de productos naturales o sustancias artificiales autorizadas para la seguridad
alimentaria. Tienen el objetivo de reforzar el sabor, el aroma y el color de diferentes productos, desde
chucherías hasta cárnicos, lácteos y por supuesto, repostería.
Los saborizantes para productos horneados deben tener la capacidad de mantener sus
propiedades después de someterse a altas temperaturas. Son ideales para la elaboración de panes,
galletas, cubiletes y pasteles, así como para la preparación de betunes, merengues y fondant.
Saborizantes en esencia
Los saborizantes pueden adquirirse en polvos, esencias concentradas, aceites, emulsiones, extractos y otras presentaciones. Las esencias, como las de Molinos Modernos, son de alta calidad para postres, pasteles y repostería en general, incluyendo helados, yogures y batidos.
De los sabores más comunes en esencias destacan los de fruta, y el saborizante de vainilla. Esta es una de las especies más antiguas y aceptadas por chicos y grandes. Se le reconoce un efecto positivo en las personas ya que, por una parte, está asociado a buenos recuerdos en la infancia, y por otra, con propiedades relajantes en la medicina. Así que es un producto indispensable en la cocina casera e industrial para despertar el sentido del gusto y el olfato, generando mejores resultados en el consumo de tus horneados.
Saca el máximo provecho de los saborizantes
El International Taste Institute explica que la combinación de aromas y sabores (estimulantes
del olfato y el gusto) da como resultado la experiencia que definimos como el "sabor" de un
alimento. Cuando algo tiene buen sabor, lo asociamos a una sensación de placer. Derivado de sus
estudios es esta área, hacen algunas recomendaciones para sacar el máximo provecho del uso
de saborizantes en la alimentación, por ejemplo:
- Los colores más intensos se perciben como sabores más intensos, ya que se asocian con fruta madura y de color brillante. Sin embargo, debe cuidarse de no caer en tonos demasiados artificiales
- El aroma de los productos influye hasta en el 80% de la percepción de los alimentos, razón para aprovechar los efectos aromáticos de los saborizantes.
- Es mejor usar aromas naturales y debes asegurarte de que el olor corresponda al sabor del producto.
- Un buen saborizante mantiene su calidad, intensidad y duración.
- Es mejor un sabor equilibrado y no uno excesivamente dulce, salado, ácido o amargo.
- Dejar un buen sabor de boca motiva a que los clientes regresen por los productos.
Ventajas de los saborizantes
Los saborizantes son buenos aliados para innovar en la repostería, permiten incrementar el sabor, olor y color de los productos sin alterarse al ser sometidos a altas temperaturas. Pueden disolverse en agua, agregarse a masas y coberturas en pequeña cantidad, por lo que tienen alto rendimiento. Son una buena forma de conquistar a los clientes y cumplen con las normas de seguridad alimentaria, siempre y cuando sean de la calidad que te ofrecemos en Molinos Modernos.